Parte 1: Los Koori Hoy te voy a contar un cuento sobre un pueblo de aborígenes llamado Koori donde con frecuencia anual acontecían milagros entre sus gentes. Se situaban en el sur de la actual Australia y eran cazadores recolectores. Su manera de vida autárquica influyó hondo en sus espíritus y su cultura, y vivían en perfecta comunión con los dioses y la naturaleza. Todo era de una belleza inimaginable. Los días 17 y 18 de Julio celebraban dos días de fiesta ininterrumpida donde entre ritos y costumbres, eran los trovadores los que tomaban especial relevancia. Con las notas musicales que producían sus didgeridoo, la fuerza sobrenatural de sus voces y sus versos totalmente improvisados y carentes de un significado concreto; el poblado adquiría tonos de fuerte contraste y hacían sentirse al pueblo en total comunión con la vida. Pero no todo el mundo estaba sumergido en la hipnótica celebración. Una serie de indígenas comenzaban el día 17 el viaje de sus vidas. Una pe...